martes, 20 de septiembre de 2011

Soñar no cuesta nada.

No mires el reloj. ¿Lo sientes? Esta noche es para ti… y para mí. Para los dos.
Sé que echabas de menos ver mi vestido volar... pero yo más tus manos bajo él. Mira la luna... igual que aquel día. Maldito día. 
No pienses eso. Hoy todo es diferente. Si cuentas, saldrá uno, no le des más vueltas... 
Las calles hoy cierran para nosotros dos. 
No teníamos por qué crecer separados. Estaba claro. Hoy sé que tus ojos no me abandonarán jamás. Joder, cuanto te he echado de menos...
¿Y tú a mí? Ya vuelvo con mis preguntas estúpidas. No puedo hacer otra cosa que mirarte. 
Sabes que no me gusta congelar el tiempo, ni pararlo. Deja que la noche pase. Deja que pasen los días. No pensemos en ellos como tal. Para mí cada día son 24 formas de echarte de menos... o de tenerte más cerca.

Pero los sueños...sueños son. Y si se pueden cumplir, las pesadillas como tal también.
Y mientras...escucho el repiqueteo de las gotitas contra el cristal…

No hay comentarios:

Publicar un comentario