Para. Coge mis manos.
¿Recuerdas? Esas tardes de sol…
Como nos gustaba inventar las vidas de aquellos que paseaban ajenos a todo lo que se desataba en nuestras miradas…
Recuerdo aquel chico de mirada triste... Como la que ahora forjan mis ojos.
Y aquellos abuelitos que se sentaban a nuestro lado cada tarde... Creía que algún día seríamos como ellos. No hagas promesas si no puedes cumplirlas. Qué ingenua fui...
Recuerdos, nostalgia, y días perdidos.
Pero todo acaba deshaciéndose. O rompiéndose. Y el corazón se vuelve hielo, y el tiempo se hace añicos.
Ajenos vivíamos nosotros, pero a lo que nos deparaba el destino… Vuelves a estar lejos, pero te siento tan cerca...
Que bonita la entrada :$
ResponderEliminarMuchisimas gracias(:
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