martes, 29 de noviembre de 2011
Demasiado rápido.
Deja atrás las decisiones precipitadas. No dejes que te tomen. Soy yo la que debería buscarlas, y mírame, aquí me tienes. Las cosas no han cambiado en mí. Siguen atacándome los nervios, el miedo me pilla desprevenida, las lágrimas no cesan, pero ya sabes que esto siempre será así. A cambio te prometo miles de apretones de labios, sonrisas que explotan por no poder callarlas y hasta que me canse de intentos de mirarte mal, pero que sé que no pasará. El tiempo pasa demasiado deprisa, pero porque estás aquí, así que ya sabes que tienes qué hacer. Llévame a la locura, que sé que me está esperando. Pero no quiere verme si tú no vas a mi lado. Que lo sé yo, que me llama por las noches. Y a ti te grita por aparecer cada primavera, que sabe que esta vida es demasiado efímera. Ya sabes qué te prometo, no hace falta que digas nada. Ven y arráncame la mirada.
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